El ya posee el control total y soberano del , el con mejores características de América Latina. Desde su histórico lanzamiento a la órbita en setiembre de este año, el sistema pasó por diversas etapas de calibración y el personal continuo su capacitación a cargo de la empresa francesa que lo fabricó. Desde el 8 de diciembre captura imágenes de alta resolución y contribuye al desarrollo del país.

Avid Román González, coordinador del Laboratorio de Investigación en Tratamiento de Imágenes de la Universidad de Ciencias y Humanidades (UCH), explica que las imágenes satelitales provenientes del PeruSAT-1 pueden servir para monitorear las zonas de minería ilegal y deforestación de la Amazonía. Se puede aprovechar también para detectar las pistas clandestinas del narcotráfico y reconocer las áreas más afectadas en caso de sismos, inundaciones o sequías.

El investigador comenta que, aunque el satélite es una herramienta fundamental para el diagnóstico de problemas, las instituciones encargadas de su operación deberán poner en marcha estrategias para una mejor toma de decisiones a partir de datos reales. “Antes, para hacer este tipo de análisis, se compraban imágenes, las cuales tienen un costo elevado. Las gratuitas estaban desactualizadas y en baja resolución. Ahora, la información estará disponible en un lapso de tres horas a un día, dependiendo de la posición del satélite”.

Para Román González, no solo las instituciones del Estado deben acceder a las imágenes para sus diferentes campos de acción, sino también las universidades porque fomentará la investigación. Los profesionales de las entidades de educación superior tendrán que registrarse en el Directorio Nacional de Investigadores e Innovadores (DINA) del Concytec y cumplir con los requisitos que ahí se establecen.

Así fue el lanzamiento del satélite

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