Yaco Eskenazi no pudo evadir la invitación del peso pluma. “Quiero que suba Yaco y peleé conmigo”, sentenció Jonathan Maicelo. La tribuna vitoreó el encuentro pugilístico así como la familia Eskenazi, sus padres, hermana, cuñado e hijos, que llegó al set para hacer barra.

Pasados algunos segundos, Yaco recibió un golpe en el labio y se detuvo a escupir sangre. La tribuna se inundó de gritos contra Maicelo, “Abusivo”, le gritaban en coro.

Para el segundo round, Sully Saénz no dudó en acercarse al campeón nacional y pedirle un poco de piedad en la pelea con Yaco. Sin duda la adrenalina ha subido la temperatura con estos deportes de contacto personal.