Nicola fue el primero en jugar Charada de Guerra y, aunque no salió lastimado, terminó muy adolorido por las llaves que ‘Zopilote’ y ‘Mirada de tiburón’ le aplicaron mientras trataba de mencionar las palabras claves.

Aunque en un primer momento, Nicola trató de ser amigable con sus oponentes las reglas del juego no le permitieron que salga del todo librado y aunque pudo sumar puntos le costó bastante mantenerse en pie y lúcido porque el trabajo de sus oponentes era impedírselo.

Instantes después de Nicola Porcella le tocó el turno a Carla Arriola, representando al grupo de las chicas. Quince segundos antes de empezar el juego y al ver lo extremo que era, ella pidió a sus contrincantes que tuvieran algo de cuidado pues ‘aún estaba pagando la cirugía que se hizo para aumentarse los senos’. Finalmente, ella hizo más puntos que Nicola y el grupo de chicos a pesar de su temor.