Milett Figueroa aceptó el reto extremo de bañarse en agua con hielo, sin imaginar el insoportable suplicio que sufriría durante 30 segundos.

A los pocos segundos de iniciado el reto, Figueroa comenzó a dar gritos de dolor mientras Mathías Brivio, a favor de Las cobras, intentaba convencerla de que abandone la tina antes de terminar el tiempo establecido.

Finalmente, Milett Figueroa resistió los 30 segundos y fue abrazada por sus compañeros Leones mientras era abrigada con una toalla.