Dentro de una de las competencias bautizada como ‘Versus’, Débora Barrantes y Ximena Hoyos recibieron la desagradable misión de comer toda una porción de criadillas de toro.

Ximena Hoyos ni siquiera probó el manjar que estaba frente a ella, pero quien sorprendió por su intensa valentía fue la combatiente del Equipo Verde al comerse más de la mitad de la porción, a pesar que en más de una oportunidad estuvo a punto de vomitar por el intenso olor y sabor desagradable.

Durante la competencia, los demás competidores no dudaron en acercarse a las jóvenes combatientes que sufrían mucho en comer la criadilla, lo cual insentivó a Débora en esforzarse por terminar la porción, lo cual le valió no ganar la batalla a pesar de que Ximena siquiera probó el contenido del plato que estuvo frente a ella.