La presión de la competencia venció a Alejandra Baigorria, quien se mostró decepcionada de su equipo y de su capitán, Mario Hart, durante la elección de los salvados de la sentencia.

“Quiero agradecer a la gente que sí confió en mí. Pero, yo ya no quiero llegar a la final de Combate. Si mi equipo no confía en mí, si mi capitán no cree que pueda, no creen que yo pueda. Entonces está bien, de repente tiene razón, me voy a mi casa y regreso cuando tenga que regresar”, señaló Alejandra Baigorria.

“Si Spheffany puede hacerlo igual que yo, ella está en mejores condiciones, entonces me voy a mi cama a descansar y punto. Entonces mejor me voy”, añadió la combatiente, quien no pudo evitar romper en llanto por la gran presión que le ocasionó retornar a Combate en medio de una gran expectativa de parte de sus compañeros.