Cuando muchos dijeron “no se puede”, cuando algunos creíamos que la escena andaba en muere, un grupo de rockeros nos demostraron que el Rock sigue más vivo que nunca y tiene una de las hinchadas más fieles, por sobre todas las cosas.

Hacía muchos años que no se realizaba un concierto de tal magnitud en el Parque Kennedy. El último que recuerdo fue la despedida de Metamorphosis hace unos años, pero luego nada. Sin embargo, ayer (sábado 7 de enero) la música tuvo su noche, y una vez más las redes sociales demostraron su poder de convocatoria a grandes masas.

Aunque no hablamos de miles, se puede asegurar que cientos de personas, entre las que tuvieron la suerte de sentarse en la rotonda y las que estaban a los alrededores, disfrutaron de las mejores bandas peruanas en un show gratuito.

Al promediar las 4:30 de la tarde, las primeras bandas salían a mostrar su arte. Mauser y Peluka Núñez fueron de los primeros en sonar por los altavoces, cuando el anfiteatro del Parque Kennedy aún no llegaba a su lleno total. La gente de los alrededores ya empezaba a preguntarse qué se gestaba en la rotonda del popular parque miraflorino.

¡EL ROCK ES CULTURA!

Luego tocó el turno de Dolores Delirio. Una de las bandas que aunque no suena mucho en los circuitos comerciales goza de una trayectoria y una fanaticada fiel, la cual demostró su devoción por la banda liderada por Ricardo Brenneisen. La tarde se ponía oscura.

Tras Dolores Delirio, se le dio pase a Theremyn 4, el cual bajo el mando de José Gallo puso a los asistentes en onda con sus loops estratosféricos y diestras secuencias.

Ya con mucha más gente, le tocó el turno a Wayo, banda cuyo vocalista fue uno de los principales propulsores de esta movida y estuvo a cargo de la conducción del evento, siempre buscando el orden de los asistentes pero la buena difusión de las energías rockeras. “La idea es que el Gobierno tome consciencia y le dé al rock peruano el lugar que se merece, porque el rock es cultura”, dijo el cantautor.

¡EL MOSH QUE TODOS QUIEREN!

Cuando la noche empezó a asomar y los ánimos se empezaban a caldear, Gaia subió al escenario para poner a saltar al público y darnos muestra de lo mejor del rock alternativo. El público ya quería pogear, y los serenos ya comenzaban a alertarse.

El poder femenino llegó, cuando las rockeras de C4 demostraron que cuando se hace hard rock, no existen esos clichés de “sexo débil”. La agrupación tocó sus mejores temas y no amilanó ante el imponente público que ya comenzaba a saltar desde las escaleras y a empujarse contra las rejas de la rotonda.

Hasta ese momento, el parque había sido tomado por los rockeros. Ya no sólo estábamos en la rotonda, en las gradas o alrededores. El pasto del parque y las bancas se habían convertido en lugares de encuentro de viejos amigos, o para departir con gente nueva.

Cabe agregar que no sólo las bandas participantes se hicieron presentes, sino también miembros de otros grupos como Audiorama, Cardenales, Salim Vera de Libido, entre otros que quisieron unirse al llamado

Cerca de las 8:30 de la noche, una de las bandas más importantes de nuestro país en cuando a reconocimientos se trata pisó el escenario del parque miraflorino. The Emergency Blanket: los ganadores del People’s Music Awards 2010 en Inglaterra, los teloneros de Faith No More, de Stone Temple Pilots, de Aerosmith, los que tocaron junto a The Strokes y Foo Fighters en un festival en Estados Unidos, ellos mismos se hicieron presentes para gritar que el rock peruano está más vivo que nunca.

Los liderados por Paco Olguín hicieron gala en la ejecución y desataron la histeria con sus riffs grunges y sus fusiones de español, inglés y quechua. El parque era oficialmente rockero y la banda no pudo tener mejor final que con su frontman saltando encima de la gente.

¡ESTO SE LLAMA POR HABLAR!

La noche no pudo tener mejor cierre que con una de las bandas pioneras del new metal hecho en nuestro país. Por Hablar saltó a escena y dejó nuestras cabezas reventando, nuestros cuerpos deshechos, sudorosos, pero saturados de adrenalina y buena vibra.

Los teloneros de Korn y Limp Bizkit tocaron los mejores temas de su único disco y sorprendieron con la puesta escena del vocalista Diego Taboada interpretando junto a su hermano la canción ‘Padre Mío’, dedicada a su fallecido padre en 1998.

‘Seguirás’, ‘Payaso Willy’, ‘1,2… one, two’, ‘Por Hablar’ fueron algunas de las canciones que interpretó la banda y que dejó al público reventando las rejas. ¡Hasta los gatos pogeaban!

Una noche intensa, de grito, libertad y mucho rock n’ roll se vivió como parte de este primer llamado. La próxima cita será la primera semana de febrero en el Centro Cultural Ricardo Palma, en show acústico. El grito rockero está en el aire y ahora queda como responsabilidad de nosotros, hacer que el Gobierno decrete leyes que reconozcan al Rock como un movimiento cultural.

Por: Robinson Reyna

@rob_core en Twitter