“Me siento traicionado por mi país”, declara el artista británico a Efe, quien vivió años especialmente duros, con idas y venidas de la cárcel por sus continuos escarceos con las drogas y el foco mediático alumbrando cada detalle de su vida, más por sus escándalos y su pasada relación con la modelo Kate Moss, que por su música.

En su opinión, la nación de Reino Unido ha sido “traicionada”, desde los tiempos de Margaret Thatcher hasta hoy, con David Cameron, que, según dice, “se ha convertido en algo así como el presentador de un programa de televisión de sobremesa”.

Más tranquilo desde la Ciudad de la Luz, Pete Doherty mira con alivio lo dejado atrás. Apunta que, de titular su momento actual con alguna de sus canciones, elegiría “Sheepskin tearaway”, “porque habla de alguien que cree en otra persona sin importar las opiniones ajenas y dejar que el amor sea un factor decisivo, por encima de todo lo demás”, explica.

Otra canción que podría retratar su estado vital, añade, es la de “Back from death” (de vuelta de la muerte). “Dios sabe que he hecho grandes sacrificios”, cuenta.

Entre los episodios más crudos, se encuentra la muerte de su amiga Amy Winehouse, fallecida en 2011 tras ingerir una cantidad excesiva de alcohol. “Yo estaba en una situación especialmente complicada cuando sucedió, recién salido de la cárcel y era como un prisionero, no podía dejar mi casa, y eso que ella falleció a poco más de 800 metros”, recuerda.

“Para ser sinceros, la última vez que nos vimos, ella no estaba bien. No la reconocí, me dio miedo y nos peleamos. No volvimos a hablar después de aquello”, confiesa Doherty, que considera que pese a que ninguno pasaba por su mejor momento, estaban “en situaciones diferentes”.

Al preguntarle sobre su salud, si se encuentra recuperado de sus adiciones, responde con un guiño a la lengua de su nuevo hogar: “Pas mal” (“no va mal”, en francés).

Doherty actúa este miércoles en Barcelona, en La (2) de la sala Apolo, después de actuar el pasado lunes en Madrid y demostrar que él solo es capaz de ofrecer un vigorizante “show”.