Llegó, cantó, saludó y hasta jugó fútbol en una favela, pero lo que Lady Gaga no podía desaprovechar era el caluroso sol de Brasil. Por eso que, mientras disfrutaba de la piscina de su hotel, un paparazzi no dudó en captarla.

La intérprete sorprendió luciendo un pequeño bikini turquesa y el cuerpo lleno de tatuajes. Con esta imagen, Gaga se despide de Brasil y el próximo viernes 16 de noviembre se presentará en el Estadio River Plate de Argentina.