Un fotógrafo cubrió con brochazos de pintura blanca una serie de grafitis que el cantante canadiense Justin Bieber pintó en la madrugada de este martes en un muro de un hotel abandonado de Río de Janeiro.

Las toscas manchas blancas sobre las figuras de muñecos dejadas por el ídolo pop en el muro, visibles en fotografías publicadas en portales brasileños de celebridades, fueron al parecer una venganza del fotógrafo, supuestamente agredido por los guardaespaldas del cantante.

Sobre el letrero en que Bieber exigió “respect privacy” (respeten la privacidad) aparece ahora el letrero “Papparazo”, a modo de firma de la persona que cubrió las pintadas.

El cantante canadiense, perseguido durante toda su estadía en Río de Janeiro por “papparazi”, fue fotografiado en la madrugada de este martes cuando pintaba una serie de figuras con pintura de diferentes colores en un muro del otrora Hotel Nacional, una edificación hoy abandonada en el lujoso barrio de Sao Conrado.

Los fotógrafos presentes en el lugar alegan que fueron atacados a pedradas por algunos de los guardaespaldas de Bieber, uno de los cuales supuestamente llegó a agredir a uno de ellos. Para garantizar su seguridad, los fotógrafos llamaron a la policía y amenazaron con denunciar al canadiense por agresión.

EFE