Johnny Winter, una de las leyendas vivas del “blues” estadounidense, murió en Zúrich, donde residía, a los 70 años, según confirmaron fuentes de su entorno.

La noticia la dio esta mañana Jenda Derringer, esposa de Rick Derringer, que durante años formó parte de la banda de Winter.

El primer medio en publicar el deceso fue American Blues Scene, quien incluyó un comentario de Jenda Derringer en el que confirmaba que el estado de salud del músico era precario.

Cantante, guitarrista y productor, Winter era conocido y respetado por haber sabido combinar el “rock-blues” británico con el “rock-blues” de Estados Unidos.

Nacido en Beaumont, Texas, logró ser uno de “los indispensables” del “blues” en los años setenta y ochenta, junto a otros “grandes” como Muddy Waters o John Lee Hooker, con los que colaboró en repetidas ocasiones.

Winter fue nominado siete veces a los premios Grammy, pero nunca lo logró en solitario, aunque sí consiguió tres galardones como productor de Waters.

No obstante, la revista Rolling Stones lo sitúa en la posición 63 entre los mejores guitarristas de todos los tiempos.

Su profundo conocimiento de la música tradicional le hizo ganarse el respeto de los musicólogos, pero su particular manera de tocar la guitarra eléctrica le consiguió un lugar en el podio, que ha mantenido hasta el final. EFE