En una de sus últimas presentaciones en vivo, Paloma San Basilio entregó lo mejor de su repertorio con un show inolvidable y el monstruo de la Quinta Vergara respondió a la entrega total de la española, pidiendo le sea entregado el premio máximo del Festival de Viña del Mar.

Las Antorchas de Plata y Oro ya le pertenecían, la Gaviota de Plata se lucía entre sus manos, solo hacía falta que la de Oro llegue a ella en señal de agradecimiento por haber vuelto luego de un largo periodo a uno de los primeros países en los que se presentó.