Cheyenne Randall, artista estadounidense se propuso lograr que estrellas de la música mundial luzcan con la piel totalmente tatuada, incluyendo a Bob MArley, Bob Dylan y John Lennon.

“Aprendí a utilizar Photoshop y comencé una ligera obsesión por lograr que algunos de mis personalidades icónicas favoritas estuvieran en un universo paralelo o tomaran otro camino en la vida. Realmente dejé que mi imaginación vuele”, dijo el artista en una entrevista a NBC.