Always On My Mind – Elvis Presley

“This is Elvis” en un documental del año 81 sobre la vida de Elvis Presley, el cual recién vi en el 88, cuando la versión de los Pet Shop Boys ya era conocida. Primero me llamó la atención que no fuera una canción original de PSB y que Elvis la había cantado en el 72. En su interpretación, uno puede sentir un perceptible dolor y como si se disculpase con su ex esposa. Recuerdo que lloré cuando la oí por primera vez.

Comfortably Numb – Pink Floyd

Son más de 8 minutos de rock pesado y siempre espero ansioso la mitad de la canción para practicar mi mejor “air guitar solo”. Los críticos dicen que tiene el mejor solo de guitarra de la historia, pero la mejor versión del solo es definitivamente la del álbum en vivo, “Pulse”. Esa es la que más oigo. Cuando la escucho, pienso que mi sueño frustrado fue ser el guitarrista de una banda de rock, que se dedique únicamente a tocar en vivo y hacer giras por el mundo, sin la necesidad de estar haciendo entrevistas ni promoción, sólo subir al escenario y tocar, nada más.

Cosas de la Vida – Eros Ramazzotti

Jamás olvidaré que sonaba dentro la sala de partos mientras nacía mi hijo.

Don’t Cry – Guns N’Roses

Para mí siempre fue la mejor canción de Guns N’Roses. Me recuerda al tiempo en el que acabábamos de separarnos con Arena Hash. Por esa época se me dio por escucharlos todo el día y Don’t Cry era mi favorita. Los Guns nunca sonaron tan pesados, pero si prestamos atención, es sólo una balada romántica con la letra más cursi que existe.

Prófugos – Soda Stereo

Infaltable en las fiestas en los 80. La parte al final del solo de guitarra cuando Cerati dice “ven”, lo es todo. Si la chica te miraba a los ojos en ese momento, era buena señal.

Give into Me – Michael Jackson

Siempre me gustó Michael Jackson, siempre fui un gran admirador de todo lo que él hacía y Slash era el guitarrista de mi banda favorita. ¿Qué más podía pedir en ese momento? Fue el dúo perfecto, en el momento indicado.

Cinema Paradiso – Ennio Morricone

Cuando se estrenó la película, llevé a mi novia a verla al Cine Alcázar. Mientras hacíamos cola, la gente de la función anterior salía de verla y entre ellas reconocí a mis padres. Mi mamá salía llorando, lo cual me causó mucha risa. Pero jamás sospeché que después de un rato, yo saldría igual del cine. La música en esa película es tan bella que casi es un personaje más.

Wild Theme – Mark Knopfler

Es una pieza instrumental del frontman de Dire Straits. Desde la primera vez que la oí en el 84, no he parado de escucharla. No he encontrado otra canción que dé la sensación de paz que ella regala.

Streets Of Philadelphia – Bruce Springsteen

Bruce Springsteen siempre fue mi ídolo máximo, el más grande. Yo estaba acostumbrado durante años a su sonido de banda de rock, hasta que apareció con esta canción totalmente digital y con un sonido atmosférico. Pensé que si él podía tomarse esa licencia, entonces los músicos podíamos hacer lo que quisiéramos con nuestra propias composiciones. En el año 94 grabé una versión, que debe estar por ahí guardada, pero lo que más recuerdo es que cuando lo vi recibir el Oscar por la película “Philadelphia”, me alegré como si Perú ganara una copa mundial.

Tannhauser (Overture) – Richard Wagner

Recuerdo que en mi casa se oía música clásica desde siempre y Wagner era uno de los compositores predilectos de mi papá. Pero esa en especial es la que me remonta a mi niñez, y es que yo se la pedía siempre. Hoy la tengo en mi iPod y cada vez que la oigo, recuerdo los almuerzos de domingo con la familia. Eso sí, a todo volumen. No la recuerdo de otra manera.

Por: Christian Meier / @oliverdog