La cantante Britney Spears y su nueva pareja, David Lucado, disfrutaron de una sencilla cena en el conocido restaurante The Cheesecake Factory de Thousand Oaks (California) hace unos días, pero al parecer ninguno de los dos se acordó de pagar la cuenta.

Como publica el portal de noticias TMZ, la pareja se dio cuenta de su error cuando ya estaban a varios kilómetros del establecimiento, pero como indica un allegado a los dos artistas, se encargarán esta semana de solventar el problema enviando un cheque que contendrá además una gratificación adicional por las molestias.

El mismo informante asegura que Britney y David se sienten “fatal” ante lo ocurrido y que todo se debe a una confusión entre la pareja y su guardaespaldas, a quien le habían pedido minutos antes que abonara los 30 dólares que costaban los aperitivos y las dos ensaladas césar que habían seleccionado del menú. Según el mismo testimonio, el empleado de la artista se olvidó por completo del asunto y acabó pensando que su famosa jefa se había encargado de todo al final.

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