En algunas culturas se usaba el vinagre para preparar una papilla que se daba a la mujer que acababa de parir y al bebé durante tres días consecutivos. Este alimento contenía además ciertas clases de plátanos, agua de coco tierno, pescado seco, sal y camarones condimentados.

En la actualidad se usa en hechizos y rituales para conseguir empleo, recuperación de la energía (cuando se siente mucha fatiga o cansancio), en asuntos amorosos y para dejar un vicio.

¿Qué hacer?

Limar un trozo de acero hasta reducirlo a polvo. Verter las limaduras en un plato hondo lleno de vinagre de alcohol. Después colar las limaduras y dejarlas a la intemperie hasta que se oxiden. Luego se las tritura del todo con una piedra, hasta dejarlas reducidas a polvo. Poner este polvo de nuevo en el plato hondo, seco, y colocar sobre las limaduras un imán. Así quedarán por espacio de un mes.

Pasado ese tiempo, triturar una barrita de azufre y poner sobre las limaduras. Agregar nuevamente el vinagre de alcohol y el imán. Sumergir durante un minuto una cinta verde en este preparado energético. Dejar secar y usar como amuleto energizante.

Fuente: Consultorio Esotérico.