Hoy en día se aceptan sus influencias sobre las mareas, sobre los cambios de la presión atmosférica e incluso sobre las fluctuaciones de intensidad en el campo magnético de la Tierra.

También se han observado importantes modificaciones en la conducta de organismos vivientes debido a las alteraciones metabólicas observadas en éstos, así como también se ha podido apreciar el comportamiento del ser humano en función a las fases de la Luna.

Durante el ciclo lunar y todas sus fases, este satélite emite una serie de impulsos que determinan formas de actuar y predisposiciones para determinadas acciones en la persona, las mismas que detallamos a continuación:

Durante la Luna Nueva se establece que es un momento apropiado para iniciar proyectos o para decidirse por alguna acción que ha venido postergando desde tiempo atrás. Es época de buenas vibras y es el momento de eliminar todo lo malo de uno mismo como vicios o malas costumbres.

En el Cuarto Creciente, se distinguen dos etapas. La primera ocurre luego de tres días y medio de haberse iniciado la Luna Nueva y dura cuatro días, y en ella se recomienda solucionar problemas relacionados con la casa, el trabajo o la actividad principal. Los cambios también serán bien recibidos en esa etapa. La segunda parte de esta etapa nos acerca a momentos de buena suerte, nos ayuda a sentirnos mejor con nosotros mismos y favorece nuestras relaciones amicales. Además, es un buen momento para hacerse de objetos valiosos.

La Luna Llena siempre ha sido símbolo de buen augurio y fertilidad, por ello que durante esta fase es que se aconseja la concepción de bebés, la consecución de pareja y hasta el matrimonio. También es un momento ideal para solucionar problemas legales, presentar solicitudes de préstamos y probar suerte en los juegos de azar.

El Menguante es la fase final del ciclo de la Luna y se considera ideal para vencer los vicios o adicciones. También es una buena para despejarse de los momentos depresivos y melancólicos, y finalmente es una etapa de gran recuperación para enfermos terminales.

Como dato final, se dice que durante los tres días anteriores a la Luna Nueva que está por llegar, es preferible no salir de casa ya que todo saldrá mal, y que lo indicado es mantenerse en meditación y relajación constante.

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