Olvídense de esos controles arcade lujosos. El jugador que arrasó durante el torneo EVO de este año utilizó tan solo un gamepad para derribar todos sus oponentes. ¡OJO! No usaba cualquier gamepad.

Luffy, miembro del equipo profesional Meltdown, logró un increíble racha hacia la Gran Final del torneo más grande de juegos de lucha en el mundo haciendo uso del control de la Play Station Original (PS1).

Dentro de las peleas siempre se maneja un estudio al rival, ya sea para intimidarlo o para ganar confianza viendo sus debilidades; lo mismo sucede en los juegos de video. Es por ello que, en un torneo donde uno se alista con los mejores gadgets, el ver aquel controlador gris jalaba miradas escépticas.

Un montón de historias personales se alimentan en un evento como EVO. La redención de las derrotas pasadas, personajes convirtiéndose en rivales peligrosos gracias a jugadores inspirados, el dominio regional, en fin… todos esos relatos pueden esperar.

El hecho de que Luffy se impusiera con un control que actualmente es considerado una reliquia en la historia de los videojuegos es algo poético. Un suceso que nos hace recordar por qué los videojuegos han llegado lejos con el paso de los años.

Fuente: Kotaku