Robert Pattinson y Kristen Stewart tuvieron una escapadita romántica a Vancouver para descansar mientras termina el rodaje de Amanecer. Tarde de compras por las tiendas más exclusivas, regalos sorpresa y cenita a la luz de las velas.

Los protagonistas de Crepúsculo disfrutaron de un exclusivo y romántico fin de semana en Vancouver. Allí los dos tortolitos pudieron disfrutar de una excursión privada de compras en la boutique de Michael Kors, donde Kristen por lo visto se probó media tienda, mientras su novio la esperaba sin rechistar, después, decidió regalar a su novia un precioso vestido de color rosa.

Ella quiso agradecerle el precioso detalle que Robert había tenido y le compró por sorpresa un reloj de plata.

Después del agotador día de compras, ambos disfrutaron de una romántica cena en el restaurante La Bodega y allí varios testigos comentan que la pareja se mostró muy cómplice en todo momento. Ella estaba todo el rato acariciando la rodilla de su novio y haciéndole mimos, mientras él se aseguraba de que no faltara champán en la copa de su chica.