El reciente destape de un video porno le sigue trayendo problemas a Kim Kardashian. Un chantajista pidió a la recién casada 30 millones de dólares para que estas imágenes no sean difundidas.

El abogado de este chantajista se ha puesto, además, en contacto con empresas XXX para vender los derechos de este material, donde se le ve a la actriz teniendo sexo con su exnovio.

“Basados en valores a largo plazo, 30 millones de dólares sería un punto de inicio para discutir los derechos (de la cinta)”, señaló dijo Steve Hirsch, representante de Vivid Entertainment, a TMZ.