El mexicano Rick Rosas tiene la misión más sagrada y rigurosa de los Premios Óscar contabilizar a mano los resultados, seleccionar a los ganadores y custodiar la maleta con sus nombres hasta el día de la ceremonia.

Como uno de los dos empleados de la consultora Pricewaterhouse Coopers (PwC), Rosas conoce antes que nadie quiénes se llevaran la codiciada estatuilla de oro a casa y viene haciendo este trabajo desde hace 11 años.

“Nosotros enviamos las papeletas de votación a los casi 6.000 miembros y luego ellos nos las devuelven directamente a nosotros, para evitar intervenciones. Después, lo que sigue es un conteo riguroso y hecho a mano, para evitar cualquier filtración por fallas de la tecnología”, contó Rosas a la BBC.

El operativo secreto fue impuesto por la Academia del Cine, luego de que en 1939 el periódico Los Ángeles Times violara todo reglamento y publicara los nombres de los ganadores un día antes de la ceremonia.

“Nunca revelamos dónde conservamos las papeletas a medida que van llegando. El conteo final lo hacemos solo Brad y yo, para asegurarnos de que nadie más sepa lo que arroja el conteo final. Desde el viernes, que termina el proceso, mantenemos un perfil bajo… somos conscientes de que tenemos en nuestro poder un secreto codiciado”, dice el mexicano, quien disfruta revisando las predicciones de la crítica especializada y burlándose de los errores de estas.