Dylan Farrow, hija adoptiva de Woody Allen, relató en una carta abierta los supuestos abusos sexuales a los que la sometió el cineasta cuando tenía 7 años, hechos que volvieron a saltar a las portadas con motivo del reciente tributo al actor y director en la gala de los Globos de Oro.

Según asegura en la carta, Allen la llevó entonces a un altillo de su vivienda y abusó sexualmente de ella (cuando tenía 7 años de edad), lo que llevó a la entonces niña a denunciar la situación ante su madre, Mia Farrow, que rompió su relación con el cineasta.

El caso salió a la luz en 1993, pero el cineasta siempre negó las acusaciones y los cargos se retiraron, por lo que nunca fue juzgado.

Tras guardar silencio durante años, Dylan Farrow narra ahora en primera persona los hechos, después de que su hermano, Ronan, criticase el tributo rendido al cineasta en los Globos de Oro por los presuntos abusos del director sobre su hija.

Según señala en la carta Farrow, que ahora tiene 28 años, el acoso de Allen la siguió mientras crecía y le llevó a sufrir desórdenes alimentarios y problemas para relacionarse con hombres.

“Cada vez que veía el rostro de mi abusador, en un cartel, en una camiseta, en televisión, sólo podía esconder mi pánico hasta encontrar un lugar en el que estar sola y derrumbarme”, asegura.

Además, la joven critica la actitud de la mayor parte de las estrellas de Hollywood por pasar por alto los supuestos abusos de Allen.

“¿Qué pasaría si hubiera sido tu hija, Cate Blanchett? ¿Louis CK? ¿Alec Baldwin? ¿Y si hubieses sido tú, Emma Stone? ¿O tú, Scarlett Johansson?”, pregunta Farrow a algunos artistas que han trabajado con Allen.

Según la joven, “Woody Allen es un testimonio vivo del modo en el que nuestra sociedad falla a los supervivientes de asaltos sexuales y abusos”. EFE