Scarlett Johansson llegó a Venecia con la mejor de sus sonrisas, su voz grave y jugando claramente a la seducción. Pero su papel en “Under the skin”, el de una alienígena en busca de experiencias humanas, no ha convencido en la Mostra.

“No tenía ninguna idea preconcebida sobre cómo preparar el papel”, pero quedó claro desde el principio que “cualquier idea que tuviera era completamente irrelevante”, resaltó la actriz sobre su papel en la película de Jonathan Glazer que participa en la competición oficial de Venencia y que hoy recibió algunos pitos y abucheos en su primer pase ante la prensa.

La actriz interpreta a una alienígena que se mete en el cuerpo de una mujer y que se dedica a recorrer Escocia observando la vida de los seres humanos, atrayendo y matando a hombres y experimentando sensaciones desconocidas. “Me llevó un par de semanas encontrar el tono para la interpretación”, reconoció Johansson.

Un filme que pese a estar protagonizado por una extraterrestre no es de ciencia ficción, pero tampoco un thriller. “De hecho no se puede clasificar en ningún género y no tiene una moralidad específica”. Casi dos horas de metraje para contar una historia vacía que parece creada por el director para aprovechar la belleza y la desnudez de Johansson.