Uno de los animales más queridos del cine ha muerto este miércoles, se trata de la mona “Chita”, que en realidad era un macho llamados Jiggs. El primate, nacido en Liberia el 9 de abril de 1932, acompañó a Tarzán en 12 películas, alcanzando la fama mundial. Hasta el 24 de diciembre, día en que se registró su deceso en la víspera de Nochebuena, Chita era el único sobreviviente del reparto estelar.

En inglés, el simio recibía el nombre de “Cheetah”, con el cual fue bautizado para acompañar a los míticos actores Johnny Weissmuller y Maureen O’Sullivan. La fama del animal fue tan grande que aspiró a tener su propio espacio en el salón de la fama de Hollywood, junto a los perros Lassie y Rintintín.

SUFRÍA DE DIABETES

Esta estrella que llegó a los 80 años sufría de diabetes, tal como reveló su veterinario Dan Westfall, quien debía inyectarle insulina para combatir su enfermedad. Asimismo, Chita contaba con un generoso desayuno de manzanas, bananas y naranjas, entre otras frutas.

Finalmente, Chita pasó a la historia en Libro Guinness de los Récords como el mono más longevo del mundo, pues con sus 79 años logró duplicar el promedio de su especie, calculada entre los 25 y 45 años.