El exministro de Cultura de Brasil Juca Ferreira cree que la industria del cine de su país vive “un estrangulamiento” por la poca afición de los brasileños para ir a las salas y la invasión de las producciones de Hollywood.

Ferreira, de visita en México, dijo a Efe que sólo el 13 por ciento de los brasileños va al cine y lamentó que las salas de exhibición casi exclusivamente pasan producciones de Estados Unidos.

Solo grandes éxitos como Ciudad de Dios (Fernando Meirelles, 2002) y Tropa de Élite (José Radilha, 2007) han conquistado los escenarios internacionales, pero son dos casos aislados, lo que muestra la dificultad que tiene la industria cinematográfica brasileña para darse a conocer en el extranjero.

Según el último ministro de Cultura que tuvo el presidente Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2011) existe la posibilidad de que Brasil una sus esfuerzos con otros países de la región para crear un mercado latinoamericano del cine.

Comenzó a analizar esa idea cuando ocupaba la cartera de Cultura, y para defender esa iniciativa se encontró una aliada en la expresidenta chilena Michelle Bachelet (2006-2010), quien en una reunión, cuando ejercía su mandato, le habló también del tema.

“Por qué no hacemos un mercado común y nos protegemos de la presencia avasalladora del norte”, dice Ferreira que le comentó Bachelet en una reunión internacional, lo que le causó una “enorme alegría” porque coincidía con las ideas que él mismo defendía.