Estaba Jaimito acostado por la noche y los zancudos no lo dejaban dormir, entonces le dice a su padre:
- Papá, los zancudos no me dejan dormir…
Y el papá le dice:
¡Apaga la luz!
Luego entra una luciérnaga y entonces Jaimito dice:
- ¡Papá, los zancudos me están buscando con linternas!