El tenista suizo, Roger Federer, dejó la competencia en el Australian Open tras caer ante el italiano Andreas Seppi por 6-4, 7-6 (7/5), 4-6 y 7-6 (7/5) en la tercera ronda. Este fue un resultado inesperado, sobre todo cuando el número dos del mundo había ganado sus diez últimos encuentros anteriores ante Seppi.

El tenista suizo no caía antes de los octavos de final en Melbourne desde 2001, sabiendo que en ese entonces era aún un joven en etapa de maduración y que la progresión le permitió ganar 17 torneo del Grand Slam.

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En la antesala del encuentro, Andreas Seppi indicó que “era consciente de que ganar era casi imposible” y se había fijado como objetivo “disfrutar del partido. Sin embargo, la realidad fue otra y terminó dejando al público australiano sin uno de sus grandes ídolos.

El tenista italiano no sólo disfrutó del encuentro, sino que en momentos claves del partido sorprendió a Roger Federer, que con muchos menos aciertos y más errores, terminó perjudicándose en la tercera ronda.