Los campeones de la Conferencia Nacional (NFC), los Seattle Seahawks, tenían en sus manos refrendar el título ante los New England Patriots, sin embargo la ilusión se volvió en pesadilla, sobre todo para el coach Pete Carroll.

“La parte de dormir funciona porque estás muy agotado después de los seis meses de la temporada. Pero me despierto y no puedo dejar de pensar en eso. Ha sido un torbellino. Me siento responsable de mucha gente en este momento. Tenía que despejar mi mente para poder enfrentar a todos”, indicó Carroll.

El coach admitió que su idea era aprovecharse de la formación defensiva que permanecía en el campo por parte de los “Pats”. Las consecuencias de su decisión fueron tan decepcionantes que ahora hasta le cuesta conciliar el sueño.

“Fue el peor resultado de una jugada. Hubiera sido grandiosa si lo hubiéramos logrado y nadie lo habría pensado dos veces”, agregó. El estratega decidió reservar a Marshawn Lynch y ordenó atacar vía aérea, pero el ovoide fue interceptado y terminaron sus esperanzas con el título.

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR: