Roger Federer, está de vuelta. El suizo, que para muchos ya debía haberse retirado, parece querer darle la contra a los años. Con el cambio de raqueta y un mejor estado físico, Federer venció al británico Andy Murray por 6-3, 6-4, 6-7 (6) y 6-3 en tres horas y 20 minutos y accedió a semifinales del Abierto de Australia , donde enfrentará a su rival de siempre, el español Rafael Nadal por un pase a la final.

La nueva raqueta utilizada por Federer parece haberle devuelto la confianza y la precisión de sus servicios. Con un saque letal y una derecha eficiente, el suizo hizo recordar sus épocas de gloria. Aunque cedió el tercer set en un tiebreak – el primero que cede en el abierto australiano – no declinó en atacar a un Murray que se veía frustrado ante el rendimiento de Federer.

De esta manera, el suizo enfrentará a Nadal una vez más, en una rivalidad que todos los fanáticos esperan y que tiene al español con una ventaja de 22-10.