Nani Roma lamentó que todo el minucioso trabajo de preparación para defender su título en este Dakar 2014 se esfumara en tan sólo 10 kilómetros y expresó que tomará lo que resta de la presente edición como preparación para 2016.

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Mientras viajaba con su coche remolcado hacia el vivac, Roma reconoció en un primer momento su desánimo y su rabia.

“Uno tiene asumido que este deporte es así y que cualquier día puedes sufrir un revés, pero no esperaba que fuera tan pronto. Quedarse en la primera especial de un Dakar es duro”, expresó el piloto de Folgueroles.

En tan sólo tres kilómetros el sensor de aceite envió una alerta que siete después lo obligó a detener su coche porque, según sus propias palabras: “no tenía sentido forzarlo más y cargármelo del todo. Hemos estando reparando todo lo que hemos sabido y más, hemos cambiado unos sensores, todo, y nada, todo ha sido inútil”.

“Hay que asumirlo y ver el lado positivo. Lo importante ahora es llegar y trabajar para el equipo, que es importante. Primero tenemos que ver qué pasa y luego veremos qué haremos mañana”, expresó Nani que esperará el veredicto de sus mecánicos, esta noche, en el vivac.

“Otra motivación, ahora, será apoyar a Rosa (su mujer, que corre en motos), darle ánimo y ayudarla en lo que pueda. Desde mañana me planteo esta prueba como preparación para el Dakar 2016. Quiero seguir disfrutando de esta carrera hasta el final”, ratificó.

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