A pesar de que los tiburones hayan estado alrededor de 400 millones de años cazando en los mares, siguen teniendo una debilidad fundamental: no pueden dejar de moverse, pues dejar de moverse equivale a dejar de respirar.

Esta es una desventaja evolutiva de este cazón espinoso que el pulpo ha aprovechado en este video de NatGeo: al inmovilizarlo, las mandíbulas afiladas del tiburón nada pueden hacer.

Debido a películas como Jaws o más recientemente Mega Shark vs. Giant Octopus, los tiburones han gozado de una terrible fama, pero el discreto pulpo ha sabido desmentirla.

Este hecho demuestra que, especialmente en el reino animal, la mala fama no te salvará de una buena estrategia.

Fuente: Pijama Surf