-Playa de vidrio cerca de la ciudad californiana de Fort Bragg, en la costa pacífica de EE.UU: Se formó de la basura arrojada durante años en el lugar. Las olas y la arena labraron el vidrio hasta convertirlo en pequeñas bolas inofensivas.

-Playa Escondida de las islas Marietas (en el Pacífico mexicano): Se cree que se formó después de que el Gobierno de México utilizara estas islas deshabitadas como blanco de prácticas de tiro en la década de 1900.

-Playa de las Maldivas: Tiene millares de puntos brillantes que hacen difícil distinguir el mar del firmamento estrellado. El causante de este espectáculo es un fitoplancton microscópico bioluminiscente que se ilumina cuando las olas chocan contra la arena.

-Playa de las Catedrales, en Ribadeo (Galicia, noroeste de España): Es el resultado de los continuos embates del agua contra la roca durante miles de años.

-Maho Beach: Es una playa en la parte holandesa de la isla caribeña de San Martín (Sint Maarten). Es famosa porque los aviones que llegan al aeropuerto adyacente a la playa la sobrevuelan a una altura mínima debido a que la pista de aterrizaje es muy corta (2.300 metros).

-Jökulsárlón: La arena volcánica de color negro de esta playa del mayor y más conocido lago glaciar de Islandia, el Jökulsárlón, contrasta maravillosamente con los fragmentos de hielo blanco y cristalino.

-Moeraki, playa de Koekohe, Nueva Zelanda: Las grandes piedras casi esféricas evocan leyendas de dragones, ya que estas rocas podrían muy bien ser los huevos gigantes de estas criaturas míticas. Sin embargo, su origen se debe a la acción de las olas y la arena durante millones de años sobre rocas con un alto componente de calcita.

-Playa de Papakolea: Los lugareños llaman a la arena verde como el ‘diamante hawaiano’. Los responsables del original color de la arena son los cristales de crisolita, una piedra semipreciosa.

-Playa de Punaluu (Hawái): Se formó de la lava basáltica que durante una erupción volcánica se depositó en el mar y se enfrió rápidamente. Tiene la arena más negra del mundo.

-Playa Rábida (islas Galápagos, Ecuador): El color de las rocas y de la arena se debe a la oxidación de material volcánico, muy poroso, por la acción de factores ambientales como el agua de lluvia, el agua salada y la brisa marina.

-Shell Beach: Es una de las únicas dos playas del mundo que están formadas enteramente de conchas de moluscos. Las valvas cubren 110 kilómetros de la costa occidental de Australia.

-Playa californiana de Pfeiffer: Cambia de color en función de la luz: la arena mezclada con diminutos fragmentos de granito puede adquirir tonos de color púrpura, lila, lavanda, burdeos y rosa. El responsable de estos cambios de color es la spessartina, un mineral que contiene manganeso y aluminio y que las lluvias arrastran a la costa desde las colinas locales.

-Algarve (Portugal): Las costas de la región están formadas de piedra caliza, que se erosiona fácilmente y puede dar lugar a impresionantes cuevas como la de la imagen.

Fuente: Actualidad RT