El presidente de la República, Ollanta Humala, quiere superar el bajón en la última encuesta nacional, que indica un descenso de 5% en su nivel de aprobación, y no encontró mejor manera que darse un baño de popularidad.

El jefe de Estado decidió acercarse al público que observaba el tradicional cambio de guardia en la Plaza de Armas.

Así, Humala repartió a su paso efusivos abrazos, besos, saludos con varios niños e incluso firmó autógrafos.