“No ha habido ninguna disposición en ese sentido por parte del Ministerio; estamos sorprendidos con que se haya registrado esta situación, creemos que no ayuda al trabajo que se viene realizando en las cárceles del Perú, porque estamos hablando de actuar contra la voluntad de las personas”, afirmó.

Precisó que los internos están privados de su libertad, pero no se su dignidad y si bien pueden ser sancionados por incumplir normas de conducta, no se les puede afectar en su dignidad.

Jiménez Mayor señaló que junto con el jefe del Instituto Nacional Penitenciario, Luis Pérez Guadalupe, se encuentran evaluando la acción a seguir contra el director del Penal de Lurigancho, Tomás Garay, y no descartó que pueda ser destituido.

Finalmente, dijo que hay 10 penales en el sistema penitenciario del país que están a cargo de la Policía Nacional.