Se defendió con todo. La congresista fujimorista Martha Chávez presentó sus descargos ante la Comisión de Justicia tras recibir varias críticas por asumir la presidencia del grupo de Derechos Humanos.

Chávez dijo que quieren sacarla de este grupo y desactivarlo porque es mujer y “no les gusta” porque ella siempre dice los que piensa y no le teme a nadie.

“Se me ha amenazado de muerte por este tema. Yo pregunto quién ha sido la agraviada en esta situación”, dijo la parlamentaria en su defensa. “A mí me han agraviado diciéndome vieja, como si eso me disminuyera”, refirió.

Por último precisó que cualquiera sea la decisión que tome dicho grupo de trabajo indicó que ella “jamás ha pedido la presidencia de nada”. “No sería hija de mis padres si cediera a las amenazas de cuatro traficantes de los derechos humanos”, finalizó.