Luego de visitarlo en la clínica La Luz, en el cercado de Lima, donde fue internado tras sufrir un infarto cerebral, la lideresa de Fuerza Popular, Keiko Fujimori dijo que dicha dolencia es una advertencia sobre la situación de su padre.

Por ello, la hija del expresidente ahora preso pidió un mayor cuidado a las autoridades competentes sobre su salud.

Indicó que el sábado 15 de marzo será sometido a otros exámenes, tras los cuales, si todo sale bien, el expresidente sería dado de alta y regresaría a la Diroes.

Agregó además que su padre tiene buen ánimo y que aún guarda la esperanza de que se acepte el pedido pendiente de arresto domiciliario.