El proceso de consulta popular para revocar a Susana Villarán del cargo de alcaldesa de Lima terminaría costando más de 100 millones de soles, estimó hoy el exjefe de la Oficina Nacional de procesos electorales (ONPE), Fernando Tuesta Soldevilla.

Precisó que a los 69 millones de soles solicitados por ese organismo para llevar* a cabo este proceso hay que sumarle los montos solicitados* por el Jurado Nacional de Elecciones (JNE), el Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec) y las Fuerzas Armadas.

“Solo para el caso de Lima, en la revocatoria estaríamos llegando a los 100 millones de soles y, si sumamos todas las revocatorias en el país de los distritos y provincias, podemos hablar de un costo total de 150 millones”, expresó el también experto en temas electorales.

Dicho monto es equivalente a tres veces lo que se invertirá en la ampliación de la avenida Costanera en el sector del Callao, y se aproxima al costo de las obras de construcción de los túneles Santa Rosa y San Martín, que unirán los distritos de San Juan de Lurigancho y El Rímac.

Tuesta Soldevilla coincidió en que un proceso de revocatoria en una ciudad como Lima, donde residen unos seis millones de electores, requiere no solo un presupuesto muy amplio, sino también una maquinaria bastante grande en términos operativos.

EN JULIO DEL 2013

Tuesta ratificó que la consulta popular de revocatoria se podría llevar a cabo, en el mejor de los escenarios, en julio del próximo año, y de ninguna manera en febrero, pues las leyes señalan que para cualquier proceso electoral el padrón se cierra en 120 días antes.

Además, dijo, sería complicado afrontar un proceso de referéndum cuando se avecinan cambios en las jefaturas de la ONPE y en la presidencia del JNE.

“Todas las revocatorias, que son los procesos más polarizados que hay, han sido siempre en el segundo semestre de cada año (…) Es necesaria la coordinación entre los tres organismos electorales para que el proceso no tenga contratiempos”, manifestó.