Huertas trabajaba en Lima como ingeniero de Sistemas en la Corte Suprema, pero en el año 2002 decidió irse a España dejando a su esposa Janina Soriano y su hijo Miguel, de entonces 4 años. Sin embargo, con el tiempo se olvidó de ellos, por lo que su mujer se fue a Argentina a trabajar.

Primero fue el juicio por alimentos. Luego, en el 2005, el juez ordenó a William a pagar una pensión de 600 soles mensuales, pero al ver que no cumplía, inició un juicio por la vía penal, sin embargo el sujeto ni siquiera envió a un abogado o un representante a las audiencias, por lo que el juez pidió su extradición y esta semana el Consejo de Ministros aprobó pedirla.

Una resolución suprema publicada en el diario El Peruano señala que se acepta el pedido de extradición de Huertas Ramírez, formulada por el Primer Juzgado Penal de Lima Este de la Corte Superior de Justicia de Lima y declarada procedente por la Sala Penal Transitoria de la Corte Suprema de Justicia de la República. Se trata de un caso que ocurre por primera vez en la historia del país.

El sujeto ya fue ubicado por la policía española y en un par de meses estará presente en el juzgado peruano, según informó Cuarto Poder.

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