Leo, un perrito de una familia Australiana arriesgó su vida por salvar a cuatro gatos de un incendio.

Dejando a un lado su propio instinto de supervivencia y la rivalidad natural entre perros y gatos, se quedó y negó salir del interior de la casa para salvar y proteger a los bebes felinos de las llamas.

Posteriormente, los bomberos llegaron a tiempo para socorrer a los animalitos que luego representaron una conmovedora escena de felicidad tras su rescate.