Hay una palabra que los define de pies a cabeza. Ellos son unos genios. Se llaman “La orquesta de las verduras” y usan estos alimentos para producir sonidos. Uno podría pensar que sale cualquier cosa de las zanahorias y se equivocaría. Es que logran sonidos increíbles.

Estos particulares músicos austríacos utilizan las calabazas, zanahorias y pepinos como verdaderos instrumentos. Son once miembros y hace 12 años que investigan las verduras. ¿Cómo se llama el grupo? “Onionoise” (“El sonido de las cebollas”).

Las prácticas de este particular grupo arrancan en el mercado de Viena donde compran sus instrumentos. Para darse una idea, en el concierto de Konzerthaus de Viena usaron algo de 100 kilos de verdura.

Los puerros son sus violines, los tambores son confeccionados con calabazas y los pepinos con pimientos, las flautas.

“Este no era un proyecto a largo plazo. Lo hicimos por primera vez para un festival y caímos en que tenía muchas posibilidades. Hemos seguido investigando y construyendo instrumentos, y además fue bien recibido por la gente”, detalló uno de los integrantes llamado Ernst.