“Sólo resultamos tres pasajeros ilesos, dos damas y yo. Venía acostado y cuando sentí la maniobra que realizó el bus, me intenté levantar pero reboté contra el asiento y perdí la consciencia por unos minutos”, contó a Radio Digital FM.

Refirió que al recobrar el conocimiento, trató de ayudar a Virginia Lector y a su hijo de 2 años, quienes habían quedado atrapados entre los fierros retorcidos, pero no pudo salvar al pequeño, quien murió desangrado a los pocos minutos.

“Intenté ayudar a una mujer embarazada y a su bebé de dos años que estaban sentados delante de mí. Desafortunadamente su hijo murió y ella quedó atrapada en el asiento. Fue desesperante. Al final logré escapar por uno de los vidrios rotos”, añadió.

Quispe reveló que la mujer aún no sabe que su hijo falleció en el choque y que prefirieron no decírselo al momento de su traslado a un hospital de Antofagasta. Dijo que se sintió impotente al ver tanta gente atrapada dentro del bus.

“Hasta ahora no sabe que su pequeño falleció. Creo que si los bomberos hubiesen llegado media hora antes, el niño se hubiera salvado, ya que aún respiraba, pero perdió mucha sangre por las cortaduras que tenía”, narró.