“Nadie sabía qué hacer”, contó Bob Eakin, manager de Curtis Lumber, uno de los negocios visitados por la mujer. “Nos saludó de manera amable, recorrió el local y se retiró sin hacer escándalo”, concluyó el sorprendido hombre.

En cambio en Stewart’s Shop, la segunda tienda visitada por Bárbara, encararon a la mujer: “Señora, ¿Usted se da cuenta que está desnuda?”, le preguntaron los empleados y le pidieron que se retire. Bárbara no se preocupó, y se fue del establecimiento sin hacer ningún escándalo.

Horas después, Bárbara Lefleur fue encontrada por la Policía, pero al momento de detenerla ya estaba vestida. De todas maneras se le levantaron cargos por exposición pública y deberá enfrentar una posible condena de 90 días en la cárcel.

La acusada se defendió ante los agentes de la ley diciendo que ella sólo estaba expresando su libertad. Una cámara de seguridad captó la imagen de Bárbara ingresando al supermercado.

Fuente: Agencias