Todo comenzó con una broma titulada “Test Drive” que un piloto llamado Jeff Gordon le hizo a un vendedor de autos para un comercial de una bebida gaseosa.

Muchos dijeron que el video era falso y que estaba “organizado” desde un principio. Uno de los principales críticos a las imágenes fue Travis Okulski, periodista experto en autos, que incluso fue a la televisión para decir que no era verídico.

Los creadores se quisieron vengar de él y se aliaron con uno de sus amigos, para que compruebe lo real de sus creaciones. ¡Mira el resultado!