Cuán fanático se puede ser como para tatuarse el rostro de su cantante, actor o personaje de ficción favorito. Pues bien, hay personas que no encontraron mejor forma de demostrar su fanatismo que tatuándose el cuerpo a modo de tributo.
Por ejemplo, Kevin Robinson es un gran fanático de los cuatro de Liverpool y no dudó en tatuarse en la espalda los rostros de Paul, John, Ringo y George, The Beatles, en una sesión que duró más de diez horas en un salón de tatuajes.
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Asimismo, Talia Lenore es una fanática “a muerte” del fallecido rey del pop, visitó su estrella en el paseo de la fama en Hollywood y luego decidió tatuarse el rostro ochentero de Michael Jackson en una de sus nalgas.
Pero no solo músicos son los escogidos para trascender en los cuerpos de sus fanáticos, los personajes de ficción y las series de televisión también son de predilección de seguidores como James Allan, de 26 años, que hizo un homenaje a la serie Breaking Bad tatuándose a varios de sus personajes, entre ellos Walter White y Jesse Pinkman, en el brazo.
Fuente: Daily Mail.