El agregado diplomático en la Embajada Peruana en Estados Unidos, José Corbera, negó la denuncia presentada por Rosmery Martell, su exempleada doméstica, quien lo acusó de tratarla como una esclava.

En comunicación con ’90 Segundos’, Corbera señaló que Martell no fue maltratada por él o su familia. “Es más nos acompañó a viajes familiares. No tenía restricciones de movimiento en la casa e incluso la matriculamos en una escuela para que aprendiera inglés”, indicó.

En ese sentido, precisó que esta denuncia es parte de una “motivación personal para obtener una visa” y quedarse a erradicar en ese país.

”(A Ella) No le interesa el daño moral que le hace a mi familia, a mis cuatro hijos, quienes están sufriendo con este trauma”, declaró y dejó abierta la posibilidad de contrademandarla.

Como se recuerda, Martell contó a la cadena CNN que el diplomático le ofreció trabajar por 1,500 dólares mensuales para trabajar 40 horas a la semana en el 2008, pero solo recibía 300 dólares al mes y trabajaba desde las 05:30 horas hasta las 23:30 todos los días.