Para crear su “Currículoveza”, Gleason pasó siete semanas creando la bebida. En el proceso, creó etiquetas para cada botella, cada una mostraba su experiencia laboral y tenía códigos QR para expandir la información.

Allí también se detalla su educación y experiencia. Cada una de las cervezas está junto a su escaparate de su trabajo de diseño gráfico, mientras que las tapas de las botellas tienen su logotipo personal.

Asimismo, y en la caja que contenía las botellas estaba toda la información, pero resumida. Y así fue como imprimió sus datos y su experiencia laboral en una caja de cervezas. Se trata de la última tendencia de combinar los CV y alimentos.

“Tengo entendido que mi inspiración está en el mundo que me rodea. Me inspiro en mis experiencias de vida, historias de clientes y el disfrute de las cosas simples que la vida tiene para ofrecer”, dijo Gleason.