Un grupo de ciudadanos decidió hacer algo para que las reuniones de trabajo dejen de ser aburridas. Por eso, crearon el partido Anti-PowerPoint, el popular programa de presentaciones visuales de Microsoft.

En su web exponen sus principios y dicen que no pretenden que se prohíba el programa si no abolir el uso obligado que se hace del mismo en corporaciones y universidades y que quienes decidan no emplearlo no se vean obligados a dar explicaciones.

“Queremos que el número de aburridas presentaciones con PowerPoint sea cada vez menos en el planeta y que la media de las presentaciones pueda ser más divertida”.

Los promotores de la idea eligieron a Suiza como sede de la organización porque afirman que en ese país cualquier ciudadano del mundo puede inscribirse en un partido. Y Anti-PowerPoint tiene voluntad de convertirse en un movimiento mundial.

Según sus cálculos, podrían ser el cuarto partido de Suiza en número de militantes. “No temas, se trata de un movimiento con un único objetivo. No perseguimos otras finalidades políticas”, proclaman en la web.

Fuente: Tn.com.ar