Alejandro Borda Casafranca, alias ‘camarada Alipio’, abatido el domingo 11 de agosto en el poblado de Pampas, en Ayacucho, demostraba su crueldad asesinando a los llamados ‘pioneritos’, señalaron fuentes de la Dirección contra el Terrorismo (Dircote).

Según información de la policía terrorista difundida por el diario Perú.21, se supo que ‘Alipio’ había asesinado a un bebé porque el grupo de mujeres y ancianos que lo acompañaban tardaba mucho en desplazarse por el monte del VRAEM.

“Se lo quitó a su madre, lo levantó de los pies, le destrozó la cabeza con una piedra y lo arrojó al abismo”, revelaron a la publicación.

El otro cruel acto ocurrió en su campamento cuando una niña, de solo cuatro años, que tenía hambre le robó un huevo. Según se supo, ‘Alipio’ la descubrió y, delante de todo el campamento, le cortó la mano con un machete.