Gran revuelo causó en la sesión del Concejo distrital Gregorio Albarracín de el regidor Luis Abanto Morales Camargo, quien se presentó con una gorra de gato.

Al ser recriminado por el alcalde y otros regidores, el regidor señaló que no podían impedirle la vestimenta. Además se defendió de una peculiar manera.

“Todos se han asustado, la verdad no entiendo por qué le tienen temor a los gatos”, dijo, aunque luego aclaró que la gorra era un regalo de su hijo.

En esa polémica sesión, Luis Abanto Morales Camargo iba a escuchar las conclusiones de un proceso disciplinario que le iniciaron sus compañeros por asistir a una reunión del pasado mes de agosto con la boca cosida.

Finalmente, el alcalde y los regidores decidieron abrirle una investigación y analizar en los siguientes días una posible sanción de 30 días sin beneficios.

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