Romina Cornejo, la niña que fue víctima de un grupo de ‘marcas”, regresó a su hogar, un año después del suceso trágico que la dejó cuadripléjica.

Carla Ramos, madre de Romina, manifestó que su hija debió ser dada de alta el 31 de diciembre pasado, pero que por una infección se tuvo que quedar en el hospital. “Gracias a Dios está bien, no tiene fiebre, está contenta, desayuna bien”, reveló a América Noticias.

Referente al pedido de nulidad de la cadena perpetúa que piden José Luis Astuhuamán y Miguel Sandonaz, responsables de la agresión hacia la menor, manifestó que “la justicia se encargue de ellos, Dios sabe porqué pasan las cosas y solo queremos salir adelante con Romina, nada más”, finalizó.